"Para lograr tus metas no basta con desearlas sino que debes actuar de acuerdo a ellas."Rosana Portelli
Cada día busca hacer cosas que te agraden y busca formas de hacer que te gusten tus tareas cotidianas. Si vas a hacer algo, concédete el beneficio de no quejarte y, en lugar de eso, muestra cariño por esa actividad. Tu lema aquí ha de ser: «Me gusta lo que hago, y hago lo que me gusta». Eso te sitúa «en el espíritu» y te proporciona literalmente el entusiasmo para ser un receptor digno de la gracia de Dios. La palabra entusiasmo procede de la raíz griega entheos, que significa, literalmente, «estar lleno de Dios».
Erradica de tu vocabulario y de tu diálogo interior los hábitos internos de pesimismo, negatividad, juicio, quejas, murmuraciones, cinismo, resentimiento y crítica destructiva. Debes reemplazarlos con optimismo, amor, aceptación, amabilidad y paz como forma de interpretar tu mundo y a las personas que habitan en él.
Cuando sientas la tentación de retroceder hacia hábitos cínicos o críticos, recuerda que esa es la energía que estás enviando al mundo, y que con ellos transmites un mensaje que bloquea la manifesación de lo que deas en tu vida. Si te llenas de negatividad, tu ser se encuentra desequilibrado y tus resentimientos indican que no te sientes digno o preparado para aceptar la energía amorosa que deseas.
Diariamente tómate unos minutos para liberarte de los sentimientos de indignidad. Ese tiempo de oración o meditación, o de experimentar simplemente el silencio, alimentará tu alma y eliminará finalmente todas las dudas que puedas abrigar acerca de no merecer el ser beneficiario de la abundancia del universo.
Tu destino depende sólo de ti. Que el amor llene tu ser.Rosana PortelliLife CoacherEFT-ADV (Ver más en: http://www.construyetuvida.com/index.php?sec=3&k=ctriunfar6