27 de agosto de 2008

DEPRE EN LOS JOVENES


En el 80 por ciento de los casos, la depresión surge de manera progresiva y gradual. De síntomas inespecíficos y silenciosos, con frecuencia pasa inadvertida incluso para el propio paciente.


A veces la desencadena la muerte de una persona querida, el divorcio de los padres, la traición de un amigo, la pérdida del empleo o cualquier otro factor externo desagradable. Incluso, el acné juvenil es una causa frecuente de depresión (muy explicable, por otra parte, ya que a determinada edad la apariencia física es un factor esencial de la autoestima).


De acuerdo con un estudio reciente publicado en el British Jornal of Dermatology, casi el 6 por ciento de quienes ven su rostro invadido por granos ha pensado en el suicidio. En otros casos, sin embargo, no hay un motivo aparente para sentirse deprimido: simplemente la persona no tiene ganas de hacer nada, ni de hablar con nadie; llora sin razón y se aísla. En los adolescentes, la depresión suele acompañar ciertos desórdenes de conducta, como anorexia, bulimia, drogadicción, violencia, promiscuidad sexual.


En términos generales, se considera que podría ser desencadenada, entre otras, por causas genéticas; por enfermedades antes mortales y hoy crónicas; por efectos secundarios de medicamentos utilizados ahora masivamente; por el consumo de drogas; e incluso por el alargamiento de la vida.


En la depresión juvenil parecen intervenir otros factores: los cambios acelerados en la forma de vida, en particular, la desintegración familiar y, según la ONU, la lenta ruptura con las tradiciones y las estructuras sociales. (artículo tomado de internet)